La Laca Vitral Eterna es una pintura creada para pintar sobre vidrio, elaborada con resinas acrílicas transparentes e incoloras que dan como resultado una fuerte adherencia en superficies lisas, gran resistencia a la luz y a la intemperie.
Además de vidrio puede utilizarse sobre diversas superficies como papel, cartón, madera, yeso, bizcocho cerámico y algunos metales, obteniendo en todos los casos excelentes resultados y sorprendentes efectos especiales.
En caso de ser necesario debe diluirse con Solvente para Laca Vitral Eterna, el mismo que se utilizará para la limpieza de los pinceles.
Dentro de los accesorios principales para complementar la Laca Vitral se encuentra la Pasta de Relieve que sirve para realizar los contornos previos imitando el plomo del vitraux de la técnica original.
La carta tiene 27 colores que pueden mezclarse entre sí para formar nuevos colores. Se presentan en un envase con tapa inviolable con fondo de aluminio adecuadas para evitar le evaporación del solvente, lo que garantiza la durabilidad de la laca en perfectas condiciones.
Producto para uso artístico. La utilización por niños debe ser supervisada por adulto.
Modo de uso
Se pueden realizar obras sumamente atractivas que retengan su belleza intacta, aún en condiciones ambientales severas.
La superficie a pintar debe estar perfectamente seca, limpia y desengrasada, sobre todo si se trata de soportes no porosos como vidrio o metal, donde la adherencia está siempre más comprometida. El método de trabajo habitual consiste en delimitar el área a pintar con la Pasta de Relieve Eterna. Se aplica mediante capas y es de suma importancia que sean muy delgadas, para evitar que se generen pequeñas rugosidades o piel de naranja.
La apertura de los frascos puede presentar alguna dificultad por la posible adherencia de la tapa al frasco, esto se resuelve golpeando suavemente y/o entibiando el cuello del recipiente.
